Casa de Manuel Busquets

En las afueras de Bogotá se encuentra situada esta acogedora casafinca.
El actor, amablemente, abrió las puertas de su hogar para los lectores de Tv y novelas.

Rodeado de mucha naturaleza, plantíos de cartuchos, árboles frutales, caballos y perros, vive el actor, a quien muy pronto veremos como el general Ospina en la novela Rauzán.
Las enredaderas, helechos y plataneras sirven de marco a la fachada de su casa.
Este camino de piedra conduce a la casa y Manuel acostumbra a recorrerlo en su potra Estrellita, acompañado por sus perros.
Cada vez que el actor llega a su casa, lo espera sus mascotas con cariños y lamidas.
En la sala predomina el color blanco. Aquí, al calor de la chimenea, Manuel aprovecha para leer sus libros preferidos. La decoración deja ver su afición por los caballos.
En este rincón de la sala sobresalen los cuadros y esculturas de pintores famosos como Negret y Caballero, entre otros, todos obsequiados por ellos mismos.
En otro estudio situó su biblioteca. Allí exhibe sus trofeos y placas y también estudia sus libretos.
En este estudio, Manuel escribe en su computador los libretos de los comerciales que realiza, y navega por Internet. Se aprecian un cuadro de Luis Caballero y su autorretrato.
Este es uno de los mejores lugares dentro de la casa. Manuel hizo construir una fuente rodeada por muchas plantas florales. No podía faltar la hamaca para descansar, con el sonido del agua como fondo.
La cocina es pequeña y está en remodelación; en ella, el actor aprovecha para preparar sus recetas favoritas.
Su habitación es muy sobria: está decorada con dos cuadros y su televisor.
El baño es impecable, sus gabinetes son en madera; se puede apreciar que el actor es muy organizado con sus cosas.
Desde un patio trasero se aprecia el comedor de estilo campestre. Al fondo se ve un cuadro que compró en Mompox cuando trabajó en Momposina y representa al Ángel Mompox, venerado en esas tierras.
En compañía de su mayordomo Jairo Lozano, Manuel es feliz recogiendo los cartuchos de su plantío, que le da buenos dividendos.
Así vive Manuel: entre sus plantíos de mora silvestre, curuba, margaritas y guirnaldas, todo un ambiente natural y puro.